¡Buenas a tod@s!,
Ayer sábado
le tocaba el turno a Toni, con quien hice hace unos días una
ruta por Sant Boi, de venir a mi zona y acompañarme para hacer
una ruta completita de BTT. Habíamos quedado a las 9AM hora de salida y a las 8 ya iba para Premià para desayunar.
Llevaba unos días dándole vueltas al tema y quería enseñarle las bondades de nuestra querida Serralada en forma de trialeras, pero también quería hacerle una ruta popurri que tuviera de todo. Finalmente, y según sus palabras, lo conseguí, y se fue hecho polvo (como yo) pero con una sonrisa en la cara.
Esta vez en lugar de salir de Montgat, salimos de Premià ya que tengo unos pequeños problemas logísticos en casa... en fin...
Salimos desde Premià y pusimos rumbo al pueblo de Cabrera para empezar la subida. Estos kilómetros llanos por el mítico Camí del mig sirvieron para ir lubricando la maquinaria y para charlar un poco.
Aquí Toni preparando la tanqueta para la ruta.
Una vez llegamos a Cabrera (pueblo bonito donde los haya), empezamos a subir por la Font Picant en busca del párking del Burriac. Una vez allí se nos presentó el primer rampón con buen desnivel. Superado seguimos subiendo en busca de la cornisa trasera desde donde se ve el castell y unas panorámicas preciosas. La subida hasta este punto es realmente dura y hubo que exigir al máximo.
Justo en la foto superior, donde se ve a Toni, se acaba la pista y empieza un pequeño corriol que enlaza con otra pista forestal. Iba con muchas ganas de este pequeño trozito ya que el corriol tiene varias subidas con raíces y quería probar subir con la doble por estos sitios. ¡Mano de santo, oyesssss! jeje, la tracción y control no se pierden en ningún momento y se traga todo lo que le pongas por delante. Este es uno de los fuertes que les encuentro a este tipo de bicis.
Una vez enlazado con la pista seguimos por las pistas anchas de la cornisa y fuimos a buscar la primera trialera, la de Òrrius que presenté algunas rutas atrás. Siempre me ha gustado ya que tiene más de corriol que de trialera ya que es una pista estrecha pero rapidísima, con curvas de 180º y numerosos saltos. Esta muy límpia y te ayuda a sentirte como un pro hehe.
Ya abajo fuimos hasta la carretera asfaltada de Òrrius y llegamos a la fuente (que no iba :-S) y empezamos a subir hasta el Coll d'Òrrius (385m) por carretera.
La subida por asfalto de Òrrius nos fue bien para volver a calentar los músculos. El día estaba límpio, la temperatura era cálida por la época del año y todo parecía girarse para ofrecer un buen día de BTT.
Una vez en el Coll d'Òrrius giramos a izquierda hacia la Ermita de Sant Bartomeu de Cabanyes y seguimos toda la pista para llegar a la cornisa de Sant Mateu. Pista forestal pura y dura para buscar cadencia y ritmo.
Al llegar arriba nos desviamos por la segunda trialera del día. La de la cornisa hacia Premià de Dalt, aunque acortamos justo termina este primer trozo. La trialera es más técnica pero tiene zonas muy bonitas de ciclar. Una vez abajo, pequeño descenso por pista forestal y otra vez a subir.
Esta subida para recuperar los metros perdidos de la cornisa es durísima. Es un enlace muy corto hacia la cornisa pero hay rampas de más del 22% con suelo algo roto y hay que tomárselo con calma.
Llegamos rotillos por el esfuerzo a la cornisa y aun nos quedaba la subida a la Ermita. En 5 minutos nos fulminamos el caminillo y fuimos a buscar la segunda trialera (que empieza al lado de la casita rural de la zona de la Ermita).
Debido a las llúvias la primera parte de la trialera estaba demasiado rota y era muy pestosa, tuvimos que andar algún trozo porque no había forma de bajarla encima. Unos metros más adelante, cuando sale de la zona sombría, la trialera se vuelve en un caminillo rápido con un par de curvas cerradas muy bonitas. Aunque sigue habiendo algún que otro cortado jeje....
Llegamos a la pista forestal y sin más dilación empezamos la cuarta trialera del día. Primera zona rapidísima y con mucho resto de árboles por el suelo. Luego se cierra un pelín y se vuelve mucho más técnica con algun que otro cortado de más de 40cm. No la recordaba tan bruta (la hice por primera vez hace una semana) pero me encantó, es muy exigente con los brazos.
Y terminamos la cuarta trialera. Ahora zona de enlace hacia el Coll de Font de Cera. Pero primero recuperar ooootra vez los metros perdidos hacia la pista de la cornisa. Curvas de Teià y arriba.
Llegamos a la pista y Toni ya me avisó de que era mejor bajar un pelín el ritmo. Yo también lo creía, y es que son 48km pero con un desnivel acumulado grande y sobretodo muy exigente y de golpe.
Llegamos a Font de Cera y hicimos la pista forestal de enlace con Alella Parc. Yo siempre la hago del revés y es una zona rapidísima pero no imaginé que haciéndola al revés tuviera ese par de paredones. Me quedé flipando. Así que para no reventar los perniles, subimos a patita.
Llegamos a Alella Parc y decidimos hacer una parada (no habíamos hecho ninguna). Aprovechamos para comer algo y hacernos una fotillo.
La temperatura era perfecta y ya casi que me sobraban los guantes largos. ¡Menudo día!
Vuelta por detrás de Alella Parc (por la parte superior) y fuimos a buscar las espaldas del Turó de Galzerán bajando por la quinta trialera hasta el camino inferior. Otra trialera complicada y preciosa. En esta el contacto con la naturaleza es literal... ramas por todas partes.
Llegamos a la pista y por fin habíamos llegado a los pies de la última trialera, para mí la más variada y espectacular (por paisaje) que hay por aquí. Además, es de las únicas trialeras que te deja abajo de todo, en Montgat.
Creo que de momento habíamos hecho bien los deberes, habíamos regulado el ritmo bien y creo que llevé a Toni totalmente informado en todo momento de las subidas y bajadas para ir a la defensiva y evitar la quemada padre.
El acceso a la última trialera tiene una subida a pata por una pared de piedras que acaba ya de reventarte las pocas energías que te quedan.
Una vez arriba paramos, observamos la zona, terminamos el último gel y pusimos rumbo al infierno de contrastes que ofrece esta trialera. Zonas técnicas, zonas mixtas, zonas imposibles y zonas rápidas. Es completa completa y encima el paisaje viendo los dos valles a lado y lado ya... increíble.
Después un rato bajando la trialera llegamos a Montgat y dimos por finalizada la ruta ya que lo que quedaba era el paseo marítimo de vuelta, y si mis conocimientos como ciclista de carretera no me fallaban, tendríamos el viento de cola y nos acompañaría hasta Premià.
Así fue como esquivando personas y a ritmo muy tranquilo para no provocar sustos (estaba a petar de gente) llegamos a Premià los dos caballeros después de una dura batalla que se resumiría en 48km con unos 1600 metros de ascenso positivo acumulado y 4:30h de batalla (paradas incluidas) con los elementos que nos proporcionó nuestra querida serralada.
Una ruta muy dura pero totalmente recomendable si os encantan las trialeras. Variedad de paisaje, variedad de recorrido (pista, sendero, carretera, trialeras...) y un recorrido muy exigente para las piernas.
Lo reconozco, acabé bien, pero por la tarde tuve me fue bien ir a andar y a hacer cosillas para relajar las piernas, las tenía más tiesas que la mojama.
